
Desde Cleopatra, los beneficios cosmetológicos de la leche de burra se convirtieron en una referencia empírica histórica.
Uno de los secretos de belleza de la reina era tomar baños de leche de burra. Los beneficios eran muy conocidos por los griegos y los egipcios, quienes fueron los primeros en darle un uso cosmético.
El doctor Rogelio J. Allignani lo recordó en su disertación durante las Jornadas Nacional de Leche de Burra.